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21/12/10

FELICIDADES

Como estamos en fechas navideñas, intentaré cambiar el tono habitual de mi firma. Y no es que yo sea áspero de natural, en todo caso lo contrario, sino que la realidad no inspira demasiadas dulzuras.
Por eso quiero felicitar muy especialmente estas fiestas a cuatro millones de parados.
Y a todos aquellos que no cobran puntualmente para pagar sus recibos e hipotecas.
También a los que, cada vez más, ni siquiera cobran y apenas tienen esperanza de hacerlo.
Y a los pensionistas que, como premio a toda una vida de sacrificado servicio, cobran unas migajas de “come y calla”.
Y a los que no les tocará la lotería de Navidad.
Y, de forma especial, a todos aquellos que, pudientes o no, tienen la convicción de que el oficio más prometedor no es el de sinvergüenza.
Por otra parte, quiero felicitar a los empresarios que han sacrificado parte de sus beneficios para no despedir a sus empleados.
Y a todos aquellos políticos o sucedáneos que cobran menos de 2.000 euros mensuales.
Y también a aquellos dirigentes que anteponen los intereses de la gente a los suyos propios.
Y a los partidos políticos, sindicatos y escritores que no pertenecen a la asociación “Burgueses de Presuntas Izquierdas Bien Remunerados”.
Según estos criterios, que cada cual asuma en su justa medida mis felicidades.

"PUENTE AÉREO"

El pasado puente de la Constitución será recordado por muchos como el “puente aéreo”. Sobre todo por aquellos que estaban dispuestos a sufragar los sinsabores de la crisis con unos días de asueto en atmósferas más limpias.
Respecto a la gestión de la crisis impuesta por esa “casta privilegiada” llamada controladores, hay una de cal y otra de arena.
Porque Pepiño ha sido muy torpe o muy chulo al elegir la fecha del decreto. Conociéndole, me suena más a chulería. No obstante, la bravuconería del señor Blanco la han pagado los muchos que han visto dilapidadas sus minivacaciones en las salas de un aeropuerto o los depauperados hoteles que, de llenos, pasaron el puente vacíos. No obstante, convendría recordar al ciudadano que el origen del conflicto, los desorbitados privilegios de los controladores, no son otros que los negociados y rubricados por nuestra querida y muy socialista de Armani Maleni Alvarez, hoy por fortuna políticamente Requiem In Pace. Que se sepa.
Por otra parte, hecha constancia de la inoportunidad del momento, Pepiño ha tenido la valentía de atajar de una vez por todas la retahíla de privilegios de los controladores aéreos. Esos caballeros reciben un potosí por desarrollar una actividad más bien simple, de mucha responsabilidad pero que puede bloquear el mundo con un movimiento de meñique. Por ello no cabía otra medida que sortear su derecho de abuso decretando el Estado de Alarma.
Pero no debe parar ahí el señor Blanco en su “Santa Cruzada contra los excesos”. E buena lógica, ahora procede desmontar también los privilegios inaceptables de la clase política, empezando por hacer regresar a sus propios hijos de unas carísimas Schools inglesas para que estudien como todo quisque en las ejemplares escuelas públicas españolas.

EL PRINCIPIO DEL FIN

Asistimos al principio del fin del virreinato socialista, un final iniciado en Cataluña y que seguramente recorra Madrid, Sevilla para acabar a orillas de Jerez de la Frontera. No es una certeza, porque todo puede ocurrir, pero sí una firme sospecha. Falta por determinar la intensidad de los reveses.
Dicen que los cambios políticos, incluso los de mayor calado, no se producen por los méritos acumulados de los entrantes sino por las torpezas y desmanes de los salientes. En este caso, siendo válida esta máxima, se ha tratado más bien de un proceso de minuciosa dilapidación. Jamás, desde que me abarca la memoria, he visto a una formación política malgastar tantas cosas; una herencia de bonanza, la gobernabilidad de sus mayorías y, sobre todo, la ilusión de tanta gente.
Con la semilla catalana, todo parece indicar que se ha iniciado "el recambio". Puedo estar de acuerdo en que la crisis internacional -esa que atinadamente el Gurú Abadía entiende no económica sino de decencia- ha sembrado de piedras el camino de la gestión socialista. Pero además ellos, como los malos médicos, han diagnosticado mal y tarde y, para colmo, han prescrito tratamientos inadecuados. Yo esperaba de ellos, como gente de presuntas izquierdas, que hubieran peleado porque los mercados no estuvieran por encima de los gobiernos, o que hubieran perseguido y castigado a los golfos que han provocado esta debacle. Eso esperaba al menos de la conjunción astral (Obama y ZP).
Lejos de ello, la crisis internacional no ha sido el problema sino el pretexto, el baúl donde se ha ido ocultando la retahíla de torpezas.
Y no es una crítica de matices o de asuntos opinables, sino fundamentada en evidencias. Desde mi punto de vista, han sido cuatro los grandes errores que conducen al paulatino desahucio de los Gobiernos Socialistas, faltas que además han sido casualmente comunes desde Madrid a Jerez.
El primero, ya referido, ha sido la inaceptable renuncia al apellido “socialista” permitiendo que los más débiles paguen los excesos de los poderosos. Han puesto en valor (una frase muy suya) algo extremadamente peligroso: que los mercados, los dueños del dinero, mandan más que los Gobiernos. No es un asunto venial, no obstante defrauda la democracia para convertirla en una dictadura solapada.
El segundo error de los Gobiernos presuntamente socialistas, de Madrid a Jerez, ha sido depositar las responsabilidades en políticos sin pajolera de gestión, decidores, charlatanes y parlanchines que embaucan pero no saben; eso es tanto como decir que la gobernación importa un bledo y lo vital es la perpetuación (las elecciones).
El tercer gran error ha sido convertir la administración pública en toda su amplitud en una enorme "agencia de empleo y gratificaciones" para los partidos. Y como eran muchos, han ido engordándola hasta convertirla en un monstruo descontrolado en el que caben correligionarios ineptos, silencios comprados, elefantes moribundos, además de amigos y familiares. Y ese monstruo, en la actualidad, está circulando a espaldas de la gente y ajeno a las realidades.
Y el cuarto gran error, el más doméstico pero no el menos sangrante, ha sido la "soberbia". Poco a poco, los dirigentes se han ido elevando del suelo de las calles y se han constituido en una "beautiful people", una "burguesía de presuntas izquierdas bien remunerada". La mutación ha sido tal que ya ni se conocen entre ellos.
Alguien, hace poco, me dijo con amargura que sólo han cambiado los dueños del cortijo porque, cómo los otros, sólo les preocupa el reparto de las cosechas.

TDT

No hay español vivo que no conozca las siglas TDT, las que definen ese invento que nos permite ver más canales y con más calidad en nuestras casas. Hasta ahí perfecto. Pero muchos españoles se apresuraron a comprar su aparatejo o su pantalla plana para aprovechar esas ventajas y resulta que, ahora, no sirven. Nadie les informó al respecto. Al contrario que en toda Europa, los fabricantes y comerciantes españoles no tenían la obligación legal de informar a los consumidores. Es decir, hay quienes compraron su aparato por un potosí para que pronto quede obsoleto o vaya a parar al cubo de la basura.
Otro asunto peliagudo es el apagón analógico. Para entendernos, dejaron de emitir como siempre y nos obligaron a comprar sintonizadores nuevos; los famosos TDTs. Mientras en Europa están agotando hasta el final los plazos del apagón, aquí lo hicimos a la ligera. Queríamos ser los primeros en algo, además del déficit y el paro.
¿Y qué ha pasado?
Nuestro Ministerio de Industria, por rapidillo, la ha diñado y tendrá que reasignar las frecuencias. Esto, para entendernos, se traduce en que los millones de hogares que hicieron modificaciones en las antenas para ver la nueva televisión lo tendrán que hacer de nuevo. Y para que lo sepan ese error sin dimisiones y hábilmente silenciado –apenas una escueta nota escasamente difundida por los medios- costará a cada hogar entre 150 y 300 euros. Con la que está cayendo.
De modo que, si llega a su conocimiento este suceso, sería responsable y deseable que lo propagara para que los aún no desengañados comprobaran la tamaña inutilidad de los que nos gobiernan.

EL PORTAL DE BELÉN

El futuro de España

2/12/10

ADIOS PAUL

Casi por casualidad, ha llegado a mis oídos cómo se produjo verdaderamente la muerte del pulpo Paul, ese cefalópodo que adivinó nuestra triunfal trayectoria en el Mundial de Sudáfrica. No obstante, alguien me ha dicho que era hijo de un pulpo emigrante español, lo que puede justificar sus preferencias.
Me cuentan que un viajero español, jerezano para más señas y no exento de cierta mala leche, decidió visitarle en el See Life de la localidad de Obenhausen, que más parece el nombre de un sofá de Ikea.
Pues bien, ese viajero se plantó frente al acuario y preguntó discretamente:
-¿Cómo ve el futuro de España, aparte del fútbol?
Paul buscó alguna cajita que señalar y, como no la encontró, movió uno de sus tentáculos y apretó con firmeza sobre su cuello.
El jerezano, sospechando de la mucha sabiduría de Paul, matizó la pregunta:
-¿Y cómo ve el futuro de Andalucía?
El pulpo pareció meditar, agitó los brazos como un vuelo de manos por sevillanas, e insistió con otro de sus tentáculos aprisionando su cuello. El pulpo Paul se tambaleó un tanto y bizqueó la mirada.
El jerezano ahondó en la cuestión mientras asomaba en sus ojos un brillo diabólico:
-¿Y cómo ve el futuro de Jerez de la Frontera?
El pulpo alargó esta vez dos tentáculos y los fue girando lentamente hasta minimizar su cuello. Finalmente miró el infinito con los ojos desorbitados por la asfixia y cayó como un pañuelo sobre el pedregoso fondo del acuario. Para acabar, convulsionó un poco y se quedó absolutamente rígido… y PARADO.
Como Jerez.

EL ADIVINO

En un barucho de la jerezana calle Porvenir, no digo cual, me he tropezado con un personaje reseñable. Redondo y colorado, el buen señor desayuna, lee el periódico y habla; todo a la vez. Y la verdad es que sus comentarios no son nada descabellados.
El primer síntoma de actividad del Gobierno Socialista desde la llegada de la crisis se ha producido ahora. La remodelación ministerial, tras obtener una prórroga de gobernabilidad con la aprobación de sus presupuestos, no está enfocada a la gestión sino a la preparación de la contienda electoral.
Esa noticia es fuente de los comentarios de este personaje. Y comenta… “han sacado la artillería pesada, para que no se los coman”.
Se refiere sin duda al posicionamiento de Rubalcaba del que dice… “Perro viejo y de colmillo retorcido. Le das un enano y monta un circo”.
Después añade… “Tome nota y verá lo que va a pasar de aquí a las elecciones, que yo soy adivino”.
-“Verá como ETA, casualmente, anuncia que deja las armas poco antes de las elecciones. También verá cómo airea el “wiki de las narices” algunos asuntos que ensucien a los otros. Y cómo se inicia la recuperación económica y del empleo; sobre todo en cifras, no en hechos. Y verá también cómo aparecen algunos escándalos de corrupción que salpiquen al PP para que las ramas tapen el bosque”.
Me advierte que él es socialista, que siempre les votó, pero no tonto.
-“Así, poco a poco, rascando, rascando...”
En lo dicho no hay nada descabellado; incluso da qué pensar. Por si las moscas, yo les invito también a que tomen nota. Las casualidades cuando son muchas dejan de serlo.

BUBA

A Buba, la querida elefanta del zoo botánico de Jerez –que yo me obstino en llamarlo Tempul-, se la llevan para que conozca varón y sea madre. Un poco tardío le viene el encargo porque tiene 30 años y, en libertad, los elefantes suelen vivir sobre los sesenta. De manera que, en todo caso, será madre talludita y conocerá los encantos de la carne al estilo Zapatero, tarde y mal.
Antes de la crisis, los planes del zoo respecto a Buba eran otros. Existía la intención de agrandar el recinto y que fuera el macho quien hiciera la cortesía de visitarla y enamorarla bajo las estrellas jerezanas. Pero el encargado de las prioridades en tiempos de crisis, que así nos va con su torcido criterio, ha decidido que esto no era importante; la “Ñ” había agotado su presupuesto en sembrar carteles y en hacer y tapar socavones junto a otras sandeces improductivas.
Y a mi juicio sí lo era, principalmente porque soy un romántico que aún contempla el valor de lo sentimental. Buba es muy querida por muchos, principalmente por los niños jerezanos; pero como no están en edad de voto sus intereses no resultan políticamente interesantes. Así que ajo.
En estos términos, la acuciante necesidad de compañía de la buena elefanta, más aún al ser un animal de naturaleza gregaria, ha sido resuelta con un nuevo parche; que se la lleven.
Temo mucho que Buba no vuelva a Jerez. Porque entre que llega, se aclimata, congenia, se embaraza, pare y cría a su hijo, habrán pasado bastantes años; los suficientes para que cunda el olvido y se sortee la papeleta.

HUELGA GENERAL

Ha sido la huelga más confusa y absurda de la democracia. Porque normalmente las huelgas son un pulso entre dos intereses en litigio; unos que piden algo y otros que deciden lo contrario, y en esta coincidió que quienes protestaban y quienes eran protestados eran los mismos; exactamente los mismos. De hecho, el setenta por ciento de los escaños socialistas están ocupados por militantes de UGT aunque muchos, digamos, de poca intensidad. Lo cierto es que los protestantes –laicos se entiende- se reivindicaban contra ellos mismos, como quien habla con los espejos. Curioso.
Dicho esto, para uno que es desconfiado como el corzo, la huelga se le antojó una pantomima, una escenificación esperpéntica, un “mire usted lo que hago para que luego diga”. Y lo explico.
Los sindicatos pretendían con la huelga un redentor lavado de cara después de varios años de sospechoso, maloliente y subvencionado mutismo. Y si no ¿por qué protestaron por los recortes del funcionariado y no lo hicieron antes defendiendo a quienes no tienen sueldo que recortar? ¿Dónde se habían metido antes?
Lo cierto es que esta jugada estética ha permitido a los sindicatos una especie de desagravio público.
En el otro lado, los señores del Gobierno, los protestados, según el guión, también han obtenido sus réditos. Han pasado con sobrado desahogo ese presunto castigo de bambalinas que ha supuesto esta falsaria huelga general.
Y es que la gente ha permanecido impávida y perpleja ante la huelga porque ha dejado de creer en los unos y en los otros. O dicho de otra forma, no se han mojado por estos o por aquellos porque ninguno de ellos merece ni un pestañeo.
Así que, menos los empresarios, todos contentos.

7/10/10

PREGÓN BANDOLERO

Grazalema
Cuando Grazalema, por mediación de su Alcaldesa, me ofreció la inmerecida honra de ser pregonero en este sugerente retroceso en el tiempo que significa la fiesta bandolera, me pregunté:
¿Cómo diablos construyo el pregón?
 ¿Con qué mimbres hago este canasto?
¿Me fío de los datos históricos cuando suelen ser manoseadas patrañas a sueldo o me dejo guiar por las leyendas, más imaginativas pero con igual fianza?
Tras un repaso concienzudo de no pocos datos y leyendas, me descorazonó un tanto descubrir que siempre decían lo mismo o lo contrario de "el Tempranillo", que parecía como si el único propósito de estas fuentes fuera catalogarle de bueno o de malo, de romántico o de forajido, de caballero o de sanguinario, de justiciero o de ladrón, de indio o de cowboy. 
¿Pero es que existe algún ser humano que sea absolutamente bueno o malo?
¿Y tanto importa eso?
Así que, tras largas y muy desconfiadas meditaciones, descubrí que existía una remota e improbable posibilidad de encontrar a alguien que permaneciera vivo casi doscientos años más tarde. Ya sé que al pronto puede parecer descabellado pero denme tiempo a que les explique.
Pues bien, con esa idea disparatada, como todas las mías, me vine a las cercanías de Grazalema, me aposté en un peñasco a media subida de Benamahoma y esperé pacientemente entre buchadas de mi petaca de Brandy, esa que nunca me abandona.
Tardó unas horas en aparecer pero llegó, con el paso cansino, algo cargada de espaldas, con la mirada indolente y perdida...
La tortuga "Leonora"
Y allí estaba el único ser vivo capaz de rozar doscientos años, mi única esperanza de encontrar una versión directa sobre la vida y obra de José María "el Tempranillo": UNA TORTUGA.
Como podrán comprender, la gran dificultad consistió en entenderme con la tortuga, no obstante, por si no lo sabían, las tortugas hablan en "tortugués". Pero yo ya había previsto aquel asunto; un buen amigo, Agapito de nombre, habla a diario con una mula, con las vacas, con los pájaros y con los grillos -si bien no se habla con su mujer-, y ya me había enseñado algunos trucos.
Para empezar y congeniar, le di a la tortuga un par de moscas y, apenas la noté confiada, le pregunté la edad. Cuando terminó de engullir me dijo con voz invisible y en un "tortugués" impecable:
¡¡¡Casi doscientos años!!!!
Perfecto, me dije, y afiné un poco más en mis averiguaciones.
¿Y no habrá conocido usted por un casual en sus doscientos años de vida a "el Tempranillo"?
Sacó su enorme cuello del caparazón marchito y me respondió rotundamente y un tanto jactanciosa:
¡Yo fui la tortuga de José María Hinojosa "el Tempranillo"!
La tortuga no me dejó tiempo para el asombro porque, de inmediato, comenzó a relatar en su jerga.
Me contó Leonora -así dijo llamarse la tortuga- que ella fue la inseparable compañía del bandolero desde que tropezaron en Sierra Morena, cuando aún era un mozo recién estrenado en la sangre por destripar a un gañán que despreció a su enamorada. Añadió con ojos sátiros:
¡Siempre estaba enamorado ese truhán o presto a galantear!
Leonora me contó también que había recorrido en la talega de "el Tempranillo" cada piedra de Andalucía, desde Sierra Morena a Grazalema, que juntos, cada cual dentro de sus posibles, habían asaltado diligencias, burlado "Migueletes" y desvalijado viajantes. Luego repartía el botín entre los pobres mientras explicaba:
El "Tempranillo"
¡Unos dirán que lo hago por bondad y justicia y otros que lo hago porque no tengo dónde gastarlo! ¡Pero, aún siendo el mayor de los avaros o perversos, el más ínclito de los vivos, es ya placer robar sonrisas al sobrado y darlas al que llora!
La tortuga me pidió otra ración de moscas con una mirada chantajista y yo consentí.
Prosiguió diciendo la tortuga Leonora que, a lo largo de su corta vida, "el Tempranillo" había cortejado y amado a no pocas damas y mozas, sin ser un hombre excedido en la apostura sino que más bien deslumbraba a base de cortesías y arrumacos:
"Y fueron amores de viento, o de tormenta cuando irrumpían los encornados maridos, y jamás supe si gozaba más con lo primero o con lo segundo".
Y fue así hasta que recaló en estas benditas tierras que pisamos y conoció a María Jerónima Francés. Dijo José María entonces, apenas verla y en tanto admiraba su lozanía:
¡Aquí, en este instante, por esa bella moza, descabalgo del caballo desbocado!
La tortuga hizo amago de marcharse pero la disuadí desparramando una buena provisión de moscas a su lado. Y continuó sus confidencias como pago mientras las mascaba.
La bicentenaria Leonora acabó diciéndome que "el Tempranillo" no era ni bueno ni malo sino lo que los demás hicieron que fuera, que era fugado porque corrían tras él, que era ladrón porque no tenía otro sustento, que era justiciero porque otros obraban legales injusticias, que era agresivo porque le atacaban...
"José María ni eligió su vida ni pudo llevar otra. Él se conformaba con llegar vivo a cada anochecida".
La tortuga, sin tener yo más moscas para retenerlas, prosiguió su camino hacia ninguna parte.
Los "Migueletes"
Más o menos en ese punto me despertó mi mujer, seguramente para algún recado. De modo que no sé si realmente ocurrió el episodio de la tortuga, si es cierto o falso lo que les cuento, en todo caso no lo será más ni menos que lo sabido al respecto. Los escritores imaginamos hasta no distinguir la verdad de la mentira; somos unos involuntarios embusteros.
Aunque, en este caso, no estoy del todo seguro, porque curiosamente, sobre la mesilla de noche, estaban la petaca de Brandy vacía y un tarrillo con el cadáver de alguna mosca.
No quiero acabar este pregón sin expresar mis más sinceros ánimos y deseos para que Sancho Gracia, nuestro entrañable Curro Jiménez, consiga la más aplastante de las victorias sobre la encarnizada patrulla de "Migueletes" que le persigue entre las sábanas.

Mi más sincero agradecimiento al pueblo de Grazalema por el mucho cariño recibido.

28/9/10

BANDOLEROS EN GRAZALEMA

El pueblo de Grazalema me ha otorgado el honor de ser pregonero de su Fiesta Bandolera bajo el título "Sangre y amor en la sierra", a celebrar este fin de semana en la localidad serrana. Mayor honor y responsabilidad aún cuando reemplazo a Sancho Gracia, el inolvidable Curro Jiménez, o al genial escritor jerezano Caballero Bonald, que por distintas y suficientes razones no pueden acudir.
Jamás me había planteado ser pregonero de ninguna cosa. De la Semana Santa porque, desde un enorme respeto, ni la vivo ni la veo. Y de una feria o similar tampoco porque la vivo tan intensamente que dejo de ver en unos segundos. Pero una Fiesta Bandolera es algo más acorde con mi condición de proscrito, de rebelde, de justiciero con causa, de no clasificado. No obstante yo vengo a ser casi un exiliado de la democracia por ese inconformismo romántico y desinteresado.
Y digo esto porque José María "El Tempranillo", cuya figura es el eje de la celebración, así como otros muchos que igual bailaban, quizás no debieran ser tenidos por forajidos en cuanto precursores de Rondanes, Giles o Julianes, sino como llanamente rebeldes ante la arbitrariedad y la opresión. Igual que yo.
En efecto, la Fiesta Bandolera gira en torno a la figura del más afamado bandolero de Andalucía, José María “El Tempranillo”, el "rey de la sierra", que tuvo una importante raigambre grazalemeña. Porque allí, entre peñascos indómitos e inasequibles que casi acarician el cielo, perdió y ganó en el mismo segundo lo más importante de su accidentada y corta vida; nació su único hijo y murió su gran amor. Si se piensa al respecto, no hay dos capítulos más cruciales en la vida.
Ese fue el punto de inflexión en la vida de "El Tempranillo", de marcar con una línea roja su pasado y su futuro, y este es el hilo conductor del gran teatro viviente en que se convierte toda Grazalema. Y vale la pena vivirlo, sentirlo, porque pocas personas tienen la oportunidad de viajar a través del túnel del tiempo.

22/9/10

LA RUINA


Si pasan por la calle Porvenir, haciendo esquina con Marimanta, encontrarán ustedes un ejemplo típico del urbanismo en el centro de Jerez; una casa absolutamente en ruinas y a punto de desplome.
Se apostó tanto por el provechoso adosadito que ahora el centro se muere en todos los aspectos.
Yo vigilo esa casa muy de cerca, a diario.
Cuando arrecia el viento y la lluvia se sienten dentro del caserón temblores y rumores de agonía, como si estuviera ocupada por un espíritu moribundo. En la azotea brotaron unas ramillas que ya se han convertido en un árbol de envergadura. Diariamente se desprende de la fachada alguna piedra, avisando, mejor amenazando, y sin embargo ahí sigue la ruinosa casa tal cual, como si fuera la Alhambra.
Hace aproximadamente un año, en un vigoroso arreón de levante, se desplomó una buena porción de cornisa; no mucha pero la suficiente para matar a alguien. La respuesta de las autoridades fue una señal de aviso y la calle cortada. No más tarde del día siguiente, la valla y el precinto fueron apartados por los cívicos vecinos y ahí siguen, en un rincón, esperando testimonialmente que suceda una desgracia. Y es curioso, pero la Policía Local multa y multa por las inmediaciones, a poco más de un metro, pero jamás han hecho por reponer la valla. Una señal inequívoca de lo que realmente importa.
En esa casa, como en tantas otras del agónico centro de Jerez, no hay eutanasia que valga. Hay que esperar a que se caiga y rezar mucho para que no haya nadie debajo, no ocurra como con las palmeras de San Mateo.

EL "DESCANSO" ESTIVAL

Se acabó lo que se daba.
Atrás queda un largo mes de veraneo en Rota que me ha servido para doctorarme en castillos de arena y cometas con el muy ganado premio de la cerveza y el espeto. Es un justo castigo al padre tardío, playa en vena por amor paterno. Lo cierto es que mi síndrome postvacacional consiste en una sonrisa como un ventanal.
Es curioso, pero los veraneos roteños son calcados, exactamente repetidos año tras año, sin que varíe una coma. Como si ves todos los años la misma película.
La eterna feria del libro en el horno de la plaza de la Cantera, el paseo de rigor en trenecito para saludar como un cretino a diestro y siniestro, la docenita de higos chumbos que como un bodegón alegran la nevera, la meritoria función de los niños del colegio salesiano, la excursión a Los Corrales para esquilmar un poco más la sufrida naturaleza...
Es curioso pero hasta la tradicional noche literaria roteña se nutre todos los años de los mismos escritores y que luego se ponen ciegos en una parranda con cargo al erario público. No se sabe qué es antes, la gallina o el huevo; la sensibilidad literaria o la etílica. Algunos se la pisan.
Al menos he aprovechado este mes espiritualmente vacío para hacer un estudio concienzudo del gregarismo humano.
Primera observación; bajé temprano a la playa vacía, planté mi sombrilla en el desierto y enseguida llegó alguien para ponerse casi encima. Segunda observación; bajé a desayunar, ocupé la esquina de una barra vacía y enseguida llegó otro para ponerse codo con codo.
Somos de borregos que no tenemos remedio.

EL DECAMESTRE

Desde la Alcaldía de Jerez nos dicen que quedan diez meses para que se visualice lo invisible de su gestión. Ojalá sea así, aunque es difícilmente creíble. Más bien es previsible que los esfuerzos sigan centrándose en buscar cuartos para seguir pagando.
Pero hay más razones para pensar que en esos diez meses se hará poco o nada. Veamos.
Aquí, en agosto, no se mueve una hoja. Y no creo que emulen a ZP renunciando a sus vacaciones, que me da la risa. Ya queda un mes menos.
Después viene el síndrome postvacacional que, en política, se emplea en afilar las hachas y los cuchillos para proseguir con eso del diálogo y el talante que, cada vez que lo escucho, micciono. Quedan ocho meses.
Y en esos ocho meses llega el lío. ¿Quién será la alcaldable socialista en Jerez? Ese debate, con su consiguiente ración de codos y arañazos, se comerá sin duda todo el tiempo que queda hasta la campaña. ¿Sánchez o Sánchez? This is the question.
Y es un tema complejo. Parece evidente que la señora Sánchez no es una candidata aclamada desde las tripas del partido y que ni siquiera cuenta con el respaldo de sus compañeros de viaje. Por otra parte, sería una temeridad reemplazar por las buenas a quien acaparó los votos ciudadanos y ganó una mayoría absoluta, aunque haya sido diligentemente dilapidada.
Imagino que dejarán que sean los acontecimientos quienes argumenten una decisión, que aparezca un pretexto mágico para borrarla sin el castigo de la ciudadanía.
Y si no, llegará el marrón. Habrá que tragar y buscar "kamikazes" que la acompañen en las listas de la hoguera, que so se preocupen que parecerán a patadas. Pero descartado el clan de los insumisos, ni hay tantos ni serán los más cualificados.

Y MAÑANA QUÉ

El Ayuntamiento de Jerez está en bancarrota.
Sin entrar a valorar la gestión, que ese es otro cantar, resulta que el esfuerzo hacedor de la Corporación, todo su mucho o poco caudal imaginativo, se agota exclusivamente en buscar cuartos para acabar el mes; como todos los mortales que no se dedican a la política. En los demás asuntos, la gestión sólo puede definirse como abandono.
No obstante, siempre encuentran un escondite y siempre el mismo; “es la herencia del pachequismo”. A estas alturas, ya vamos estando hartos de ese regate constante a las responsabilidades; que si el franquismo, que si el PP, que si la coyuntura internacional, junto a otras pamplinas.
Creo que ya está bien de monsergas.
Nosotros, los votantes, damos la confianza a los políticos para que solucionen problemas y no para que naveguen con viento a favor o nos cansen con lamentos. La señora Sánchez sabía con todo detalle lo que iba a encontrarse en el Ayuntamiento, casi al céntimo, y aceptó el reto. Si no se sabía capaz de arrostrar los problemas, tendría que haber declinado. Pero claro, un sillón de Ayuntamiento tira mucho. De momento, como a sus "hermanos mayores", a la señora Sánchez no se le conoce otra obra que muchos remiendos y lamentos.
Al estilo nacional, la consigna del partido es clara, la habitual; nosotros somos malos pero los otros son peores. Pero olvidan o quieren olvidar que, quieran o no quieran, la oposición ni toma decisiones ni gobierna. Son ustedes los "pijirrojos" los que aciertan o se equivocan y lo demás es puro ventilador.
Las ayudas recibidas de la Junta para salvar el tipo son un parche puramente político para evitar males mayores. ¿Pero quién va a pagar las próximas nóminas? ¿Seguimos olvidando que el verdadero problema no es pagar sino la cantidad desorbitada que se paga? Bastaría hacer unos tests mínimos de capacidad y méritos para adelgazar dos tercios la nómina administrativa de la provincia de Cádiz, y más aún en ese organismo inexplicable que es la Diputación. Pero eso no conviene.
También está la opción de recaudar más. Quizás por ello últimamente nos están acribillando a multas, indiscriminada e injustamente, ahogándonos más.
Una medida muy socialista de una izquierda de mentirijillas.

6/7/10

PÁJAROS DESAHUCIADOS


La brillante idea de podar los árboles en esta época provoca en las calles un sembrado de pajarillos huérfanos y madres enloquecidas tras ser desposeídos de sus nidos. Tantos que, en un solo y distraído paseo por la calle Porvenir, he llegado a recoger una docena de gorriones y media de jilgueros. Supongo que no importa demasiado, al fin y al cabo son como niños y ya sabemos cómo se las gastan al respecto.
Lo cierto es que a mis hijas les cuesta comprender esta falta de sensibilidad y a mí, bastante más crecidito, también; aunque ya rebose mi contenedor interno de asombro. Parece ser que, últimamente, todos los hechos se inspiran en ese rasero de utilidad acomodada.
De modo que, por obra y gracia de esa poda extemporánea, un servidor tiene la casa infestada de cajitas de cartón, con pajarillos hambrientos y melancólicos a los que damos de beber y comer regularmente y con la incierta esperanza de ser reconfortados como salvadores de la clase pájara; de los que vuelan, no de los peatonales. Y es así porque, como muchos padres -no todos-, no sabríamos explicar a nuestros hijos que la poda se produce cuando a alguien le sale de los "gemelos", o porque jamás nos perdonarían una omisión de auxilio a criaturas desvalidas. Incluso un buen número de abortistas estará de acuerdo con este punzante asunto de conciencia, aunque no con el otro.
No obstante, la experiencia me dice que, a pesar de los cuidados, buena parte de ese ejército de pajarillos morirá sin remedio y, entonces, tendré que devanarme para consolar a mis hijas y organizar velatorios masivos en el parque del Retiro.
Pero es que además, indagando un poco sobre el aspecto botánico del asunto, todos los expertos coinciden en que las podas deben evitar siempre la primavera y el verano.
Así que menos comprendo el antojo de podar bajo el fuego y de emborricar los corazones de tanto niño. Claro, salvo que el asunto haya sido promovido por algún asesor botánico municipal, de esos aconsejadores que fueron contratados por habilidades y sabidurías tan altas que ni la misma Alcaldesa conoce.

28/6/10

DEMOCRACIA ASESINADA

He llegado a la conclusión de que los distintos regímenes políticos, desde la dictadura a la democracia, son grandes mentiras. Que no son otra cosa que herramientas para que los mismos, en un caso u otro, muevan los hilos de nuestras vidas.
Lo fue la URSS y Alemania, lo es Venezuela y Cuba, y lo son las llamadas democracias occidentales ahora que la crisis les ha subido las faldas. Y digo democracia por decir algo, porque se me antoja una doncella violada.
La actual crisis ha puesto al descubierto que ni Obamas ni por supuesto Zapateros, elegidos por la entrecomillada soberanía popular, son defensores nuestros. Sino que son designados por otros y nos los cuelan por narices para que nosotros les legitimemos en las urnas. Al respecto, recuerdo un referéndum en la Venezuela de Chaves en que, contestaras lo que contestaras, ganaría el “primate colorado”.
Y nosotros, pobres borricos, nos contentamos con ser comparsas y sentirnos más machos con el solo hecho de ponernos ante la pecera y dar nuestro voto, que ya luego el votado hará lo que le manden o lo que salga de los gemelos.
Con la crisis, toda esta mentira se ha destapado.  Primero, hemos descubierto que somos más pobres e infelices por las golferías de otros. Segundo, que nuestros gobernantes no han movido un dedo para evitarlo, más bien al contrario. Tercero, que aparecen por todas partes miles y miles que engordan a la sombra de este invento. Cuarto, que estos se rebajan una miaja lo que les sobra mientras nos quitan al resto lo que nos falta. Quinto, que pudieron enderezar todas esas desviaciones y no tuvieron huevos.
¿Y quieres ustedes que crea en esta democracia?
Amo profundamente la libertad pero, lamentándolo mucho, reniego de esta democracia asesinada.
Por último, sólo están legitimados para rebatirme los que antes acrediten quién les paga.

24/6/10

INTEGRISMO "GAÍTA"

Yo soy de los que lamentan que el Cádiz Club de Fútbol haya descendido a Segunda B. Sé que no son muchos los jerezanos y xerecistas que piensan como yo, pero es mi sentimiento y así lo digo. Aunque puesto a buscar, que todos buscamos una pizca de sosiego para las circunstancias ingratas, encuentro sólo una razón que me reconforte.
Sucedió en Cádiz hace ya algunos meses. Acudí a la Diputación para resolver algún asunto burocrático, de esos inventados para legitimar el puesto de trabajo de un amigote, y desayuné en las inmediaciones. Tan tranquilo estaba aniquilando mi café y una tostada de escalofrío cuando escuché a mis espaldas una conversación muy próxima a la siguiente:
-Me da miedo la marcha del Cádiz -comentó una voz primera-.
-No te preocupes, que saldremos adelante -respondió una segunda voz ronca y determinada, sabedora de todas las cosas-.
Hasta ahí nada relevante; un comentario típico de lunes tras una derrota. Uno que teme y lo dice contra otro que teme igualmente y huye hacia adelante. Por tanto decidí seguir avasallando mi tostada. Y así estuve hasta el término de la conversación de mis vecinos de barra.
-Verás como el año que viene estamos los dos en segunda, el Xerez y el Cádiz -acabó la voz rotunda y omnisapiente mientras se marcaba unas risas sardónicas y de muy mala leche-.
Cuando me giré, algo encabritado, pude comprobar que el autor de la “gracia” no era otro que el señor Cabañas, Presidente de la Diputación de toda Cádiz, incluida Jerez. Pensé en replicarle pero me mordí la lengua en el convencimiento de que las venganzas se sirven frías.
Y llegó ese momento. El señor Cabañas, con su comentario desafortunado, se equivocó a medias, lo cual supera con creces su porcentaje habitual; bien es cierto que el Xerez está en segunda pero el Cádiz no. Y yo, sin ser como él innecesario representante de toda la provincia, lo lamento.

22/6/10

INMOVILIDAD


Cuando un partido político, cualquiera, accede a una Alcaldía, la que ustedes deseen, la primera tarea no suele ser la principal sino la más impactante. Y me explico. No es prioritario abordar asuntos relevantes ni acuciantes sino acometer proyectos que se vean, que se palpen, que hagan ruido, aunque fastidien, en definitiva que rubriquen un cambio. Viene a ser como un sello marcado en la frente de los ciudadanos para que se sepa que han llegado. Estos "cambios por el cambio" suelen tener una doble trayectoria, como las cornadas malas, la ejecución y la rectificación.
El actual equipo de Gobierno Municipal de Jerez de la Frontera, tan equipo como la selección francesa de fútbol, eligió para este menester un Plan de Movilidad que pronto fue transformándose en Plan de Inmovilidad. Y no era poca cosa. Trastocaba las calles de mayor tránsito -que se note-, hacía la gran puñeta a los comercios del corazón de la ciudad, fastidiaba las recogidas de los colegios, confundía los tradicionales modos circulatorios y modificaba todos los trayectos del transporte urbano. Parecía como si la filosofía del plan fuera adrede "si las cosas eran así, pues ahora las ponemos al contrario".
El Plan de Movilidad tuvo un parto delicado y, tras una larga dolencia, agoniza irremisiblemente. Porque a veces, frecuentemente, las cosas son como son porque no pueden ser de otra manera y la estructura de Jerez no admite demasiadas alternativas.
La calle Porvera, tras repetidos cambios, levantadas y hundimientos, vuelve a ser exactamente lo mismo que era, salvo el invento de la pintura naranja como última obcecación por miccionar en la esquina. El tráfico, tras numerosas y desorientadoras revueltas, vuelve a sus orígenes. Los autobuses urbanos, caso de que sobrevivan cuando escribo estas líneas, regresan a los trayectos de siempre. Y por último, la calle Honda, el último reducto de ese ruidoso Plan de Movilidad, regresa a sus antiguas funciones hasta que se acometa el tranvía; o sea hasta nunca.
Pero no crean que el jueguecito ha sido gratis; una pasta gansa para nada. Y ahora multan y recaudan a ultranza para abonar los caprichosos dispendios de los ludópatas del poder, de quienes sin tener ni pajolera marcan de gris nuestras vidas diarias.
A veces, más bien a menudo, me pregunto para qué sirve tanto político, tanto asesor y tanta gaita. Quizás bastaría con regalarles un monopoly.

11/6/10

EL PARO Y LAS MASCOTAS


Leo con algún estupor que el paro ha hecho aumentar en Jerez el número de mascotas; entendiendo por mascotas los animales de compañía y no otros.
Uno, que por deformación reflexiona a la más mínima, una actitud al parecer en desuso, se rasca la cabeza.
A bote pronto, esa asociación de datos, parados y mascotas en el mismo saco, se me antoja un poco apresurada. Porque si me da por asociar el aumento del paro con otras subidas o bajadas me aparece la sonrisa.
Por ejemplo, bajo el mismo criterio, alguien podría decir que el aumento de las mascotas hace disminuir el número de asesores municipales. O que el aumento del paro razona la subida del recibo de la luz en un 26%. O que el aumento del paro incrementa el índice de golfos que visitan la presidencia del Xerez Deportivo. U otras ocurrencias que me callo porque vivo en Jerez. Son, sin duda, una serie de correlaciones tan simpáticas como maliciosas, pero altamente gratuitas.
Pero vuelvo a la noticia de las mascotas, porque hay más conclusiones jugosas. Y nos cuentan también que el aumento del paro ha provocado que los jerezanos acudan menos al veterinario. Pues sí, y al supermercado, y al peluquero, y al sastre,… Y apunta además que la crisis ha disparado el número de ladridos, probablemente porque, ya que los sindicatos han estado bien calladitos, protestan los perros. ¡Animalitos!
Conclusión; el mejor amigo del parado no es ZP, ni Griñán, ni megaPilar, ni los sindicatos, sino el perro.

3/6/10

EL TIEMPO PASA Y NADA CAMBIA

El viernes pasado presenté mi última novela, “Ardeviejas”, en la Fundación Caballero Bonald de Jerez de la Frontera. Para los escritores, las presentaciones de sus obras son como bautizos, el culmen de al menos un año de trabajo intensivo, ingrato, imposible y nada reconocido. Por esas razones, tras un doloroso parto, les resulta grato sentir en ese preciso momento el aliento de los suyos, los cercanos y los paisanos.
Me contaba en cierta ocasión Gustavo Martín Garzo, el notabilísimo escritor vallisoletano, que él era persona solitaria y acaso introvertida pero que las presentaciones de sus libros se convertían en una multitudinaria muestra de adhesión de sus paisanos, conocidos y no conocidos, dispuestos a alentar a alguien que pasea con orgullo el nombre de su tierra. Acabó diciendo que aquello, y no otra cosa, le daba fuerzas para seguir escribiendo.
En mi caso, pocos jerezanos acudieron a mi presentación, apenas algunos familiares y amigos. Lo más llamativo es que no hubo ni la más mínima representación de la corporación municipal, esos que tan frecuentemente se arrogan el patrimonio de la cultura, como si el buen o el mal escritor nutriera su potencial creativo y sus habilidades narrativas de unas u otras siglas. Sólo asistió una representación del PP, que todo hay que agradecerlo y decirlo. Y como no fueron los dirigentes también faltó la nutrida cohorte de pelotas, de todos conocidos, que no aportan pero al menos abultan y dan colorido.
Y fue una lástima. Porque pocos pudieron escuchar a José Ruiz-Mata, que no es precisamente conocido por sus repartos de flores, defender con vehemencia a los escritores jerezanos del club del desprecio, generalmente porque no se encuadran en el monopolio del pensamiento. O a José Vicente Pascual, el más crítico de los críticos, que sin embargo defendió mi novela y mis presuntas pericias hasta casi emocionarme. Gracias a ambos, porque pesaron lo mismo que un millar de asistentes.
Tras el daño infligido que no fue poco, que incluso sospecho adrede y pudiera derivarse de mi independencia pública y de señalar a cretinos y golfos sin mirar sus siglas, llegaron las meditaciones y conclusiones, las inmediatas irrepetibles y las aplazadas mesuradamente tangentes a la indignación. Entre todas, mi firme propósito de no reincidir en presentar otra novela mía, sea cual sea, alcance o no el sitio al que aspiro, en un lugar donde se desprecia de tal modo la buena literatura. Quizás ahora, como ya le ocurriera a Caballero Bonald y salvando las distancias, se me acuse de antijerezano. El tiempo pasa y nada cambia.

18/5/10

NEGRO ZAHÍNO

Digan lo que digan, que mienten más que hablan, pintan bastos. El panorama me sugiere a un sepulturero decrépito vestido de negro cavando en pura piedra con una cuchara. Y denominadores comunes en la gestión socialista: la reincidente improvisación.
La crisis sube un nuevo escalón. Ya afecta a los funcionarios, a los pensionistas, a las madres, embarazadas o en vías de serlo, y otros nuevos inquilinos. Ya no sólo es la crisis de parados, curritos menores o empresas mientras la otra mitad se escapa de rositas. La cosa se complica.
Pero además el patrimonio gestor del señor ZP y sus secuaces dejará un paisaje escalofriante. El renacimiento de dos bandos en consecuencia del proceso inquisitorial del Dios de la tolerancia, cuando más nos hace falta el abrazo. Un juez encausado al que se le busca destino en el más alto tribunal europeo; como si se nombrara a Roldán presidente de un banco, o de la CEOE. Los sindicatos ¡por fin! amagan con mover ficha, que luego habrá que verlo. Parados y parados por las esquinas. Y una deuda que hay que pagar urgentemente generada por políticas torpes y manirrotas, que se veía venir. Y mientras, un gobierno presuntamente socialista que se amorra al pilón del sistema, sodomizado por los que verdaderamente gobiernan este mundo descabellado. Hasta su presunto amigo Obama le ha pedido que despabile.
Y lo peor y más preocupante: que nadie en el partido socialista rechista. Señal de que puede más el fundamentalismo de las siglas o el estómago caliente que el bien común.

NEGREDO Y VILLAR


Resulta que el señor Negredo, futbolista del Sevilla, de manera reiterada y absolutamente reconocible, gratificó al juez de línea con la frase "me cago en tu puta madre", afección que le valió la tarjeta roja, o sea la expulsión del partido.
El árbitro de turno lo reflejó elocuentemente en el acta, es sancionado para la final de la Copa del Rey y el club sevillista, como suele hacerse en estos casos, recurre; supongo que por si cuela. Y coló.
Sin entrar en valoraciones, porque el asunto me la trae al pairo, sí es cuando menos curiosa la argumentación por la cual el Comité de Competición de la RFEF le retira la sanción. Tampoco sé porqué me extraño; si la RFEF está presidida por un inútil diplomado, en buen lógica su cohorte debe ser de la misma ralea.
Pues bien, la argumentación federativa viene a decir que "cagarse en la puta madre del linier" -hasta cinco veces conté-, que ya es tener el vientre suelto, sólo merece una amonestación porque se trata de una mera desconsideración, más aún cuando el jugador asegura que no existió intencionalidad.
¡Cinco veces sin querer, espaciadas en el tiempo y sin intencionalidad!
Supongo que si yo les llamo a ellos cinco veces gilipollas del trasero, en mi caso argumentadamente, no emprenderán acciones de ningún tipo, más cuando lo hago casi sin querer. En todo caso seré, por analogía, amonestado por formular observaciones.

18/3/10

CARGADITOS DE DERECHOS

Hay muchos asuntos evidentes que nadie comenta, algo similar a la blasfemia en tiempos de inquisición, y todo ello por una perversa e inducida hipocresía que retrata nuestros más elementales atrasos en los usos culturales y democráticos. Se trata de la candidez de una mayoría para engullir toneladas de mentiras y manipulaciones, un inconveniente que se cuidan mucho en remediar
Parece como si existiera un pánico generalizado a la hoguera, a plantar cara a determinados tabúes políticos, de galería y meñique tieso, a decir sencillamente lo que se siente y se piensa aunque vulnere las buenas costumbres de la opinión.
Para empezar, ser de izquierdas está bien visto y ser de derechas no, una impronta que la progresía mediática ha conseguido implantar en la sesera del ciudadano con óptimos resultados electorales. De modo tal que un individuo de modos y conductas fascistas afiliado al PSOE, que los conozco a patadas, es considerado a lo sumo como “severo hombre de izquierdas” y ese mismo individuo en el PP, cosmética aparte, es calificado cuando menos como cavernario, nostálgico, recalcitrante, franquista, reaccionario y derechona de siempre. ¡Lo que hace algo tan simple como un carné!
Y lo dice alguien que no es de ninguna parte sino un mero observador de la realidad.
Este fariseísmo se plasma en numerosas actitudes ciertamente incoherentes que luego desembocan en una grave quiebra de la correlación entre el verdadero ideario general y los rumbos políticos.
En la calle chillamos ¡no a la pena de muerte! pero somos conscientes de que mataríamos si tocan a nuestros hijos. A los nuestros, pero no a los del vecino. Entretanto defendemos la vida de un animal, que casualmente tiene apariencia humana, mientras asesinamos criaturas en ciernes sencillamente porque son socialmente molestas. Hitler, segunda parte.
O promulgamos las excelencias de la enseñanza pública y nos damos tortas por matricular a nuestros hijos en la privada. Sería muy aleccionador un estudio que delatara cuántos hijos de nuestros políticos y sucedáneos estudian en esos colegios públicos que tanto defienden. O cuantos agnósticos llevan a sus hijos a colegios religiosos. O cuántos rajan de la iglesia mientras se visten de nazareno.
O hablamos de nuestra honestidad intachable en contraposición al golferío predominante pero callamos que, como todos, tenemos nuestro precio, unos más caro y otros más barato.
O nos llenamos la boca de igualdad y derechos, principalmente esos políticos de escaparate o los sindicatos de “esteticiene”, y mientras nos acabamos el chalé, navegamos en yate y apuntalamos un sistema desigualitario, no en lo económico, sino en las oportunidades reales.
Nadie habla a la gente de obligaciones porque quita votos, al contrario se convierten en conseguidores y limosneros que nos otorgan gracias y dádivas a cambio de nada.
Mientras tanto, España está inundada de inútiles y zampabollos cargaditos de derechos.

15/3/10

UN PAJARITO VOLANDO

Les voy a enseñar un truco político muy utilizado y que, no por ser moneda de uso corriente, deja de ser reprochable. Es interesante para que vean los entresijos manipuladores de este invento llamado democracia participativa.
En el transcurso de nuestras vidas, en el diario, nos han acostumbrado a que sea más importante lo visible que lo invisible. Y sin embargo, lo visible se corresponde con una versión maquillada de la realidad mientras que lo invisible, lo oculto, lo escondido, se ajusta con una precisión a veces escalofriante con los crudos hechos.
Es decir, hablando en plata, si quieren conocer la verdad limpia de polvos y pajas, jamás atiendan a los cambiantes titulares de prensa, ni a lo enfatizado en las instancias políticas de presuntos diálogos, sino que intúyanla más bien de lo que usted ve y los altavoces callan.
Concretamente en política, tienen mayor importancia los distractores que los hacedores. El triunfo no está en la gestión, en los aciertos, sino en que la gente visualice como positiva una mala gestión. Y de muestra un botón. ¿Porqué todos los estamentos de gobierno dedican el mayor de los esfuerzos a las tareas de comunicación?
Los hacedores políticos son los que proponen rumbos y soluciones, los que llevan el timón, en nuestro caso desgraciadamente al pairo. Los distractores son los elementos que ensalzan los aciertos propios pero, peor aún, los que minimizan o manipulan las repercusiones públicas de la torpeza de los primeros.
Y no es algo que yo esté inventando sobre la marcha sino que es una práctica diaria, indiscutible y calculada; tan real y evidente como la crisis.
La técnica empleada y el fin perseguido son sumamente sencillos. Viene a ser, para entendernos, como las argucias que utilizan padres y madres –siguiendo escrupulosamente las consignas de la ministra Aido- para alimentar a los bebés. “¡Un pajarito volando!, decimos para que miren hacia otra parte y abran la boca. Y entonces ¡Zas!, cucharada al canto. Tal como los bebés, nos avisan continuamente de pajaritos y nos tragamos platos y platos enteros.
Y una demostración práctica. Tomamos cualquier periódico y, página por página, marcamos visiblemente las noticias que verdaderamente van a tener repercusión directa en nuestras vidas y dejamos tal cual todo aquello que sepa a silicona, o los debates intrascendentes, o las discusiones verduleras. Al acabar, hojeamos el periódico y comprobaremos que lo resaltado representa apenas un cinco por ciento del contenido. Lo demás, en su mayoría, son espurios pajaritos o maniobras onanistas de escusado.
A mejor gobierno, menos pajaritos, y a peor gobierno, bandadas.